Cronica ascension Monte Perdido 18 y 19 de Abril de 2009

Visto y no visto, llegamos a Torla a buena hora de almorzar. La autovía Mudéjar permite esa posibilidad siempre y cuando inicies la jornada a una hora provechosa y sin demora alguna (5:05 mañana en ruta fue nuestro inicio). Estos tres miembros del Tracalet (Pedro, Guillermo y Raimon)

Mientras alquilábamos las raquetas de nieve, un guía de montaña de Torla nos informaba del tiempo de días pasados y del estado de la nieve.


Iniciamos el camino hacia Góriz con el recuerdo de 10 años atrás cuando por primera vez acudí al Valle de Ordesa. En aquella ocasión Pedro también era de la partida.

En cuanto tuvimos la primera ocasión nos pusimos las raquetas pero al poco tiempo decidimos, tras subir dos repechos, continuar la marcha sin ellas, ya que seguro tendríamos que hacer uso de ellas a partir de las cadenas.

Guillermo, que era la primera vez que visitaba Ordesa, se quedó enseguida agradecido por la belleza de este valle


Decidimos reponer fuerzas comiendo a pie de la Cola de caballo y enseguida iniciar la ascensión vía las cadenas. Ya en ellas un grupo de Silla retornaba al parking abandonando su idea de hacer noche en Góriz dado que el estado de la nieve obligaba a abrir huella en todo momento y uno de sus componentes iba justito de fuerzas.

A medida que se iba ascendiendo uno disfrutaba del buen tiempo y del paisaje que nos rodeaba. Tras una marcha de 6 horas llegamos al refugio de Góriz. Mientras descansábamos, entablamos conversación con el guarda del refugio quien nos preguntó cuales eran nuestras intenciones. Al comunicarle que el objetivo era la ascensión al Monte Perdido pronto nos alertó del peligro: Nivel 5 de avalanchas (el máximo). Nos aconsejó no subir, más si cabe que hacía unos días que nadie había coronado y desconocía el estado de la nieve.

Durante la cena decidimos que en otra fecha no muy lejana haríamos frente a nuestro objetivo y dado que no existía posibilidad alguna de coronar otro pico retornar a Valencia un día antes de nuestra programación.

A la mañana siguiente el retorno por el valle nos lo tomamos con calma a fin de plasmar fotográficamente el esplendor del entorno que envolvía durante ésta época a Ordesa.


Edicion: Raimon
Fotos: Raimon y Pedro

Semana Santa 2009, Espeleo Cántabra. Del 9 al 13 de abril

Cantabria, capital de la espeleología sin lugar a dudas. A pesar de estar practicando espeleología en el club desde siempre, nunca se había planteado visitar las famosas cavidades que nos presenta esta provincia. Siempre que visitamos est zona hemos estado en nuestro territorio de exploración en Bejes (Picos de Europa), no por desconocimiento de las demás zonas, sino por la lejanía de esta tierra. Pero este año Jero, propuso visitar estas tierras en la semana santa del 2009.

Jueves 9 de Abril del 2009, salimos a las 6.30am de Vinalesa Raimon, Guillermo, Jero y Víctor dirección Zaragoza, donde recogeríamos a Bego completando así el escuadrón de los Diablos Rojos de la espeleología. Sobre las 15.30 llegamos a Ason, nuestro campamento base y degustamos los primeros filetes y chuletones de la zona (Madre mia, como se come!!) . Allí dejamos trastos en el Hotel de Coventosa, y fuimos a visitar y dar el primer susto a nuestra Master Cad, en el tienda MTDE en Ramales de la Victoria (a 20 min. de Hotel base). Una vez vaciada la cartera nos dirigimos a Arredondo, donde se estaban realizando las I Jornadas de la Montaña Cántabra asistimos a la charla-exposición del grupo de espeleo AER, “Exploraciones en el Macizo de Mortillano”, excelente exposición donde contaron batallas y anécdotas de sus recientes exploraciones.

Viernes 10 de abril de 2009, La lluvia hace acto de presencia para indicarnos que el verde de los pastos no es fruto del Titanlux, sino de las cuantiosas precipitaciones anuales de la zona, nos levantamos, y bajamos al sótano a compartir comedor con el resto de espeleólogos alojados en el Alberge. El comedor es muy pequeño y decorado con un estilo barroco de tendencias espeleológicas, monos sucios y húmedos colgando sobre nuestras cabezas, aroma a carburo, sacas pringadas por doquier, el personal vestido con Grifones y demás forros polares de cuerpo entero y mobiliario a base de banquetas, cajones y politenos donde asentar los traseros ,con un tema de conversación en comun, ¿Qué vais hacer hoy? ¿Cómo fue ayer…?, conversaciones 100% espeleológicas, donde no tiene lugar la tertulia del futbol y demás deportes de masa, Espeleo 100%. Subimos al coche, sincronizamos altímetros y vamos en busca de nuestra integral, Tonio-Cañuela, tiene un acceso de 1 hora y media y un desnivel de 400m ascedente. La lluvia persiste y el acceso esta fangoso y desagradable, así que después de un petit comité en el coche de Jero, cambiamos el plan y decidimos visitar Coventosa, de acceso inmediato (15min.), con la esperanza que mañana cambie el tiempo y nos haga más agradable el paseo al boca de Tonio.

Coventosa, cavidad de cavidades, sus dimensiones nos impresionan ,galerías donde nuestras frontales no alcanzan el techo, las galerías parecen grandes avenidas urbanas y nosotros parecemos turistas despistados, con planos de una la gran urbe y preguntando a los “espeleólogos del lugar” con los que cruzamos, como llegar a los tres lagos, objetivo marcado al inicio de la visita. Nuestra destreza orientativa y algún que otro consejo conseguido, nos llevam al momento "cool” del la visita, cruzar los tres lagos. Begoña y servidor decidimos cruzar dos lagos y dar media vuelta y al inicio de los lagos para retomar fuerzas y empezar el regreso. Los intrépidos Raimon y Guillermo, capitaneados por Jero, deciden cruzar el último lago en busca del enlace de Cueto-Coventosa. El trió, despues de cometer su objetivo, regresan con buen ritmo, lo que da luga a que nos alcanzen cerca de la salida, para visitar de vuelta la sala de Los Fantasmas (nuestros compañeros de Getafe nos indican como llegar), foto de rigor y salida rapida de la cavidad, dirección Hotel Base donde daremos tiento algun Filete y un par de copas de Patxi de la zona para recuperar fuerzas.

Sábado 11 de abril de 2009, improvisamos comedor en una de nuestras habitaciones, abandonando el desayuno espeleólogo people, pasando a la zona Vip, comedor con tostadora, mantequilla y demas viveres dignos de un H*****, debatimos la batalla espeleología del día y decidimos retomar el intento a Tonio-Cañuela, esta vez, no decantamos por un acceso de 40min y 150 metros de desnivel, comentado la noche anterior en el bar, con nuestros compañeros de Getafe, con los que compartimos unos botellines y unos pacharanes. Una vez realizada la combinación de coches, pillamos una ventana de buen tiempo, (como diría teropus) y pudimos realizar el acceso a la boca de Tonio en seco, pero pillamos retención (es lo que tiene las grandes ciudades-cavidades en fecha punta), tenemos un grupo de 4+4 delante de Catalanes y detrás otro 4x4 de Valencianos. El descenso es lento y un poco torpe, lo que las paradas son continuas y dan lugar a hablar y berrear con los compañeros. La Tonio tiene un trazado vertical, sinuoso y con estrechezes que dificultan los rapeles, El grupo de 4 catalanes primero, desconecta del segundo, más flojo, despistado y sin topo, Jero coje el mando y nos dirije hasta la vertical de la gran Sala. A partir de aqui la travesia da un giro de 180º, la cavidad se convirte en galerias de enormes dimensiones de trazado horizontal y cargadas de preciosas y caprichosa formaciones. El grupo de valencianos se queda hacerse una sopita en la gran sala mientras nosotros y los 4 rezagados catalanes iniciamos la salida. A partir de ahora, los horarios los cumplimos con bastante normalidad. A la salida, todavía nos esperan los últimos minutos de luz solar que nos facilitan la búsqueda del coche, esta vez la ventana de buen tiempo se ha cerrado y el regreso es bajo una intensa lluvia. Seguimos con la técnica de Filetes y Pacharán para recuperar fuerzas antes de acostarnos.

Domingo 12 de abril de 2009, nos levantamos, desayuno repetimos desayuno Vip en la habitacion y preparamos jornada espeleológica. Hoy se forman dos grupos, Bego y Víctor marchan a hacer turismo por la costa Cántabra por la playa de Laredo y Castro-Urdiales, mientras en trío de espeleólogos de elite, deciden ir a la integral de Tibia Fresca. Volvemos el grupo playista y el móvil nos pone nervioso, 8 llamadas perdidas y un mensaje “Que Galerías, que bóvedas! La capilla Sixtina de Cantabria!! Nos vamos a celebrarlo a Arredondo (frente al porche de los conciertos) Nos vemos” Se me hacen los dientes largos y vamos en busca de nuestros compañeros que nos cuenten de las maravillas bajo tierra. Entramos en la taverna y la imagen es clara, vemos a Guillermo, Raimon y Jero pletóricos, en una mesa con más de 20 espeleólogos, repleta de botellines, cecina y queso, nos han tomado el pelo, no han podido localizar la cueva y se han dedicado a las relaciones publicas de bar en bar con espeologos de la zona. En pocas horas las relaciones hicieron efecto, sobre las 01.00 am Guillermo estaba negociando el alojamiento para el año que viene en las Casuchas de Anso (este secretario no descansa, que vocacion!).

El lunes 13 de Abril del 2009, saciados de hacer espelo, relaciones públicas, beber vino, y comer buenas carnes, nos levantamos pronto para emprender el viaje de regreso.
Solo decir, que ya tenemos alojamiento para el año que viene, donde volveremos a comer y beber bien y si el tiempo lo permite, también haremos espeleo.

9º Pujada a la Nevera (Atzeneta del Maestrat)

Bueno, esto ya parece más un blog de atletismo que de espelología y barrancos. Pero como nadie se anima, pues os seguiré aburriendo con mis crónicas.

Se trataba de la 1ª prueba puntuable para la Liga de Curses de Muntanya de Castelló-Nord. La liga se compone de un total de 6 carreras y por lo visto, sólo puntuan los 50 primeros, consiguiendo los demás un punto simbólico.

La carrera empezaba a las 8 de la mañana, así que a las 5 ya estaba en pie. Como de costumbre, me preparo un buen plato de pasta, aunque las horas no incitan mucho el apetito. Tras el café, me cambio y junto con Ana me dirijo hacia Atzeneta.

Llegamos al pueblo. Brrrrr!!!! Que frío!!! Todavía no se ni que ponerme, así que opto por la equipación de los indecisos: manga larga, guantes y mallas cortas. Tras recoger el dorsal, vamos Ana y yo a tomar un café… y a dejar el último regalito. Debe ser el cumpleaños de alguien, pues hay cola en el baño :D. El de hombres está ocupado, y el de mujeres libre. Aun así espero delante del de hombres. Un minuto… dos minutos… hasta que digo… venga, si no va a venir nadie. Así que hago un mutis y me cuelo en el de señoras. Cierro y a los 30 segundos llaman a la puerta! Joder… es la Ley de Murphy. Al salir me encuentro con Mónica (Miraval, una barranquista muy activa) esperando para entrar y nos presentamos (lo sé, no era el mejor momento….).

Quedan 5 minutos para la salida. Hay casi 600 personas apelotonadas en el callejuela en apenas unos metros cuadrados. El ambiente es algo más que familiar… 3, 2, 1… PUMMM!!! Chupinazo y crono en marcha. Como de costumbre, me he puesto de los últimos y el tren de salida sale poco a poco. Tras cruzar la línea de salida, empieza a escampar la gente entre coches, aceras, farolas… por delante, 26 km y 1.050 metros de desnivel positivo.

Enseguida empezamos por las pistas ascendentes. Esta vez el circuito transcurre por pistas anchas, por lo que adelantar (o que te adelanten) es más fácil. Esto te permite ir a tu ritmo, pero… y cuál es mi ritmo?? Las pistas suben y suben y suben… no tienen mucha pendiente, pero van haciendo mella en las piernas. Ya no puedo más, toca caminar. Prácticamente se puede correr durante todo el recorrido, pero eso es para los machotes. Más quemao que el cenicero del challenger, intento no bajar el ritmo. Llego al primer avituallamiento. Todo son prisas que se contagian. Me bebo el isostar de un trago, cojo el plátano, lo pelo, echo a correr y sin parar me lo trago ya de nuevo en el circuito. Joder! que estres… y que mal me sienta. Los quilómetros empiezan a pesar y en el segundo avituallamiento me lo tomo con mucha más calma (no hay café??). Aprovecho para llenar el bidón. Al poco, comienza un tramo de bajada. Vamos escopetaos por una senda terrosa. Voy siguiendo al de delante, que lleva un buen ritmo. Sus gestos me avisan de lo que me espera por delante… eso sí, como caiga nos vamos los dos a tomar por… La bajada se prolonga más de la cuenta y ya me quedan pocos cartuchos que gastar. Falta poco para llegar al próximo avituallamiento y de pronto, un gemelo se me monta! Buff… intento mantenerlo a raya, pero bajo el ritmo. Me saco la barrita y le empiezo a dar bocaos, pero se me queda una pasta seca dando vueltas por mi boca… no hay manera de comer esto leches!. Todavía quedan 6 kilómetros que se me hacen interminables. El otro gemelo se ha contagiado y empieza también con los calambres. Luego la pantorrilla, para terminar con los pies!!! Mami, que mal estoy. Al rato, parece que el isotonico y la barrita hacen algo de efecto y consigo mantener a raya las rampas. Las cuestas hacia abajo se me están dando fatal… ni contar como se me dan hacia arriba. Dos kilómetros para meta, un kilómetro… por fin entramos en el pueblo. Hay gente animando, y se agradece un montón. Por fin veo el arco de meta y acelero (de 4 km/h paso a 4,000001 km/h) . Por fin!!!, pero… joder, hay otro arco más adelante! Bueno, pues continuo y por fin!!! Y … otro arco más??? Esto es como una tortura china!!! Pero el tercero si que es el definitivo. Por fin cruzo la meta. Tiempo: 2h 44 min. Mucho mejor de lo que esperaba. Me siento para tomar aire mientras me quito el chip. Esta vez, al intentar imprimir más ritmo, lo he terminado pagando durante la bajada. Cosas de ser novato, imagino. Aun así, estoy contento, sobretodo por haber terminado. Me espera una cervecita y… un masaje! Jejeje, no me lo puedo creer pero así es. Buff…. Casi me duermo tumbado en el banco mientras me amasaban las piernas. Un puntazo, la verdad. Más tarde me encontraría con Ana, Victor y Begoña que han venido también a la marcha de 13 kilómetros que se organizaba de forma paralela.
Como colofón, una peaso paella de arroz a banda de la muerte junto a la playa. Lo peor al día siguiente: Vaya guajetas!!!!

El circuito me gustó. Corredor pero con bajadas muy técnicas que incluso atravesaban un barranco. Del paisaje, Ana me dijo que era bonito…

Un saludo!

XIV Subida al Terrero de Chella

Foto: Club Deportivo Es Posible

Prueba no puntuable para ninguna liga y con un desarrollo de 8.300 metros... (desnivel desconocido) . Vamos, una volta a peu con alguna que otra cuesta. El principal aliciente es que está en el pueblo de al lado y parte del recorrido era conocido. Ah! y la inscripción gratis! Para que veais lo que se estiran en mi comarca...

Pues eso, que de nuevo me embarqué en esto de las carreras, aunque los aglomerados hidrocarbonatados (el asfalto) fueron la tónica habitual de este recorrido, marcado por dos pendientes matadoras.

Caos en la recogida de dorsales. El número había que buscarlo en un listado que a estas alturas se encontraba esparcido por todo el paseo. Toca tirar de apellidos y nombre. A mi me toca el 100... (po vale). La avenida está a tope de gente. Los previos juveniles ya han ambientado el lugar y la policía no para de dar vueltas a la plaza con las sirenas... todavía no se para qué (???). Son las 17:00 y el crono de meta se pone en marcha.

Me quedo de los ultimos para evitar trompicones, pero los nervios nos hacen empezar a correr a los de la cola sin que avancemos apenas medio palmo. Por fin, casi un minuto después logramos cruzar la linea de salida.

El recorrido comienza picando hacia abajo, hacia el río. Pasamos junto al salto de Chella, una cascada de unos 40 metros, para continuar bajando. Tras superar un vadén, comienza la primera cuesta matadora. Voy adelantando a algunos corredores. Muchos ya han dejado de correr para seguir a pie. Intento dosificarme, pero la prueba es de las explosivas, así que apuro hasta llegar al final, donde aguarda una pronunciada bajada que aprovecho para "descansar". La verdad es que bajar se me da mejor y es donde adelanto a más gente.

El camino sigue con perfil ondulado, sin grandes desniveles y va acercándose de nuevo al río. Esta zona, que ya conozco de venir a entrenar, aguarda una empinada subida que culmina ya de nuevo en el pueblo, a escasos metros de meta. Al poner el primer pie en la rampa, bajo el ritmo para reservarme, pues se lo que queda todavía. Algún osado me adelanta... se la devuelvo un poco más adelante. Llegamos a un llano de unos 400 metros. Al final, la última cuesta aguarda. Hay que echar el resto ahora porque después, sólo queda la meta. Adelanto a unos cuanto, llego arriba y tras virar a izquierdas en la segunda calle, desembocamos en la avenida. Los últimos metros se hacen eternos, pero no me guardo nada y en un sprint final, adelanto a tres más... la meta.

Como premio, una camiseta, una botella de agua y un yogurt. Como recompensa una buena marca, 38:00 y la ducha en casa.

La próxima, el 4 de abril, en At-zeneta del Maestrat, puntuable para la liga de Castellón Norte (chivatazo de Monica). Muy oficiosa, pero 19 euracos que vale la jodía. Ya os contaré.