Invernal exprés. Barranco de Tourmont, fallido.

Barranco situado en el Valle de Ossau, a tres kilómetros del paso fronterizo del Portalet y a las faldas del emblemático Pico Midi d'Ossau.

Viernes sobre las 20:00 salíamos desde Valencia Popi, Diego y yo, destino el Valle de Tena.

Llegamos sobre la una de la madrugada y directamente al sobre, tendríamos que madrugar para aprovechar las condiciones de temperatura bajo cero.

A la mañana siguiente, recoger trastos, desayuno rápido y hacia nuestro destino.

La sorpresa llegó cuando nos incorporamos a la carretera general. Todos el mundo parado, eran esquiadores que aprovechando el buen tiempo subían a Formigal. Para recorrer 20 km nos costó casi una hora y la temperatura subiendo, cosa que no nos favorecería en nada.

Una vez pasadas las pistas de esquí y el paso fronterizo, el tráfico desapareció. Llegamos el barranco que transcurre paralelo a la carretera.

No pintaba nada bien, muchísima nieve y las temperaturas en aumento, ya estábamos a -1ºC. Pero habíamos llegado hasta aquí y por lo menos lo teníamos que intentar.

Nos enfundamos los neoprenos y para dentro. 

Nos costó bastante llegar desde la carretera al cauce, cada paso que dábamos era un suplicio, nos hundíamos hasta las rodillas.

Una vez en el cauce, este no estaba helado como nos hubiera gustado. Había pequeñas zonas donde no había nieve y veíamos correr el agua y desaparecer de nuevo por debajo de esta. La progresión se complicaba, en cualquier momento podríamos hundirnos y acabar dentro del agua y bajo la nieve.

Por fin conseguimos llegar a la primera cabecera. En condiciones normales en un resalte de poco más de tres metros que destrepa sin mayor dificultad, en nuestro caso era inviable, estaba cubierto de nieve. Pudimos alcanzar una instalación y de ahí hasta la marmita, esta sí que estaba totalmente congelada. 

Un pasamanos nos lleva al siguiente rapel. Este estaba completamente congelado. Descendimos los tres y cuando estábamos recogiendo las cuerdas oímos un fuerte estruendo detrás de nosotros, era parte del hielo de la cascada que se había desprendido dejando ver el agua cayendo por detrás para desaparecer de nuevo entre la nieve.

Se confirmaba que el descenso ya no era viable.

Aun así continuamos por el cauce  y llegamos a la parte mas engorgada.

Asegurando a Diego, logró llegar hasta la siguiente cabecera donde pudo ver en las condiciones que se encontraba el pasillo estrecho, punto donde el barranco de engorga.

La temperatura aumentaba, ya estábamos a 12ºC y en el pasillo había demasiada nieve acumulada. Decidimos abortar ahora que estábamos a tiempo.

Empleamos casi tres horas hasta llegar al principo de este pasillo. En condiciones normales no se tarda más de media hora.

Popi no había tenido bastante, así que se puso a montar una tirolina de parte a parte del cauce. Remontó por ella y luego descendió. Está hecho un campeón.

Nos salimos por el lateral hasta la carretera y de ahí al coche.

Nos cambiamos y rumbo a casa. A las 20:00 del sábado ya estábamos en casita.

Redacción: Andrés.