Después de unas ligeras lluvias, Carlos Salsa propuso realizar el barranco de Bercolon. Finalmente fuimos a la actividad Salvados, Carlos y yo (Marc). A eso de las 9 pasadas estábamos almorzando en Chelva y cogiendo fuerzas para la jornada
Como barranquistas bien preparados, teníamos todos clarísimo la ruta a seguir en coche hasta el parking, sin embargo, cada uno de nosotros habíamos recopilado la información a nuestra manera.
Después de pensar y reflexionar todos los caminos posibles e incluso discutir cual era el más idóneo finalmente llegamos al parking a eso de las 11. Cogimos el material y empezamos la aproximación de 1hora y 30 minutos hasta la cabecera.
A partir de aquí, dejamos las discusiones de lado y como buen grupo empezamos a disfrutar del descenso. Nos reímos, contamos anécdotas, y disfrutamos mucho
El barranco llevaba un hilito de agua desde el inicio, sin embargo no hicimos ningún salto por falta de profundidad.
Avanzamos a paso ligero, y aprovechamos para disfrutar todos los rápeles del barranco, así como para practicar desviadores y pasamanos.
El día salió todo nublado, y en alguna ocasión llovía chirimiri, por lo que los neoprenos fueron necesarios.
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